De la melena inculta a la calvicie,
del número inicial a lo incontable,
desde la tumba hasta la superficie,
tras breve veinte tan multiplicable.
Me llega un canto alado
de fiebres de la infancia,
me brota la invención y el ansia.
Y entero y mutilado,
furiosamente a besos,
te doy mi corazón travieso
Hombre (fragmento) Silvio Rodríguez
Es obligado un recuento anual, dado lo extraño del año, será
sólo eso, recuento, los efectos consecuencias y demás se dejarán sentir en los
siguientes años. Año extraño, lleno a la vez de avances, triunfos, sueños, desilusiones
y sobre todo música y gente nueva en mi vida.
Más o menos logré reincorporarme al mundo. No fue proceso
fácil, siempre que abandono el rol de espectadora complico todo, me da por
ponerme a escribir el guión y los demás nunca hacen bien su papel, a mi modo de
ver; no por eso, trato de entender que tan humano mi guión como el de ellos.
Este año hice honor a mi apodo en yahoo: intentode, y vaya
que lo intenté, a varios de ustedes les consta. Sin embargo esto de volver a
empezar, por más experiencia que se tenga es muy difícil.
Por tanto he llegado a la conclusión de que la única manera
de seguir adelante es trazando mi propio camino, uno en el cual las reglas sea
yo quien las ponga, así no me peleo con nadie. Quizá conmigo, pero eso siempre
lo he hecho.
Mi país, como siempre, de mal en peor, cada vez tengo menos
esperanza, algunos amigos nuevos, jóvenes todos ellos, me dan una poca; pero dudo
que mis ojos vean muchos avances hacia mi ideal de gobierno, si es que tengo
alguno; es parte de lo que tengo que resolver este año.
No sé si es la edad, no sé si es el mal de la época, pero
cada día me cuesta más emocionarme con situaciones, ideologías, personas. Sin
embargo eso me acerca más a la naturaleza, no hay día o noche que yo no vea de
qué color es el cielo. No me desanimo porque se me mueran las yerbas pues las
flores se me dan muy bien extrañamente. Este año fue espléndido, me regaló
muchos cielos azules por la mañana, naranja y violeta por las tardes. Noches
llenas de estrellas y lunas enormes que hacen recordar la infancia. Sin duda
mis animales han sido fuente de muchas satisfacciones.
He sufrido un terrible bloqueo para escribir, suele
sucederme cuando estoy bien, parece que necesito azotarme para ponerme a
aporrear el teclado. Así que aunque mal está bien que así haya sido. Pero
pretendo cambiar eso radicalmente. Retomo las mañanas de escritura y decido que
he de vivir de lo que escribo, ojo, he de vivir he dicho, no hacerme rica ni
nada por el estilo.
Mis hijas me están poniendo la pauta, ambas están también en
proceso de iniciar cosas, eso me gusta, cada una en lo suyo creo podemos
lograrlo. Lo importante es que somos nosotras, siempre unidas, amándonos,
cuidándonos a lo lejos y cerquita cuando se necesita.
Nuestra pequeña familia creo que por fin termina el
bachillerato, tenemos experiencia y talento, es hora de usarlo en beneficio de
cada una, podemos aprender y ejercer de lo que sea, pese a la época y el país
en que vivimos, nos sobran inteligencia y talento.
Lamentablemente, la parca ha sido también generosa, no me
simpatiza, pero no por eso, siempre sirve recordar que estamos aquí en
tránsito, no somos más que polvo de estrellas que el viento mueve a su antojo y
tarde que temprano tenemos que volver al sitio del cual venimos. Me avengo a la
idea de que cada estrella, cada mariposa, es el alma de alguna de las mujeres
queridas que he perdido en los últimos años. Guerreras ellas, longevas también,
me merecen todo el respeto y admiración algunas por lo triste de sus vidas y
otras precisamente por lo contrario.
A mis viejos amigos les pido perdón por tenerlos un poco
abandonados, a excepción de unos cuantos no los he visto ni he hablado mucho
con ellos, no por eso, han estado en mi corazón todo el tiempo, y en mis
pensamientos. Les deseo a todos, los nuevos y los viejos que logren encontrar el
coraje y el valor para enfrentar el año que viene con alegría y dignidad, pese
a los esfuerzos del mal gobierno, como dice AMLO, por hacernos desdichados.
Gracias a todos los que me han apoyado en mis esfuerzos por
lograr mis metas este año. Mi compromiso es hoy más fuerte que nunca, sigo de
parte de los necios, intentemos lo imposible, juntos podemos.
Los amo a todos,
feliz 2014.